Adiós a Lenin
Dejar de ser aquello que durante tanto tiempo fuimos no es fácil. Reconocer que nos equivocamos, que erramos al pensar que nuestra ideología era la mejor, no puede sino dejar un cierto tufo a derrota. Sin embargo, que reconfortante es ver la luz al final del túnel. Que hermoso es que la esperanza nos haga una seña; es una bendición que la alegría nos tome entre sus brazos y nos brinde atención y amor como al más pequeño e indefenso de sus hijos.
Vistas las cosas de esta forma ya no se nos pinta tan dramático el cuadro.
Es por esto que hago del conocimiento de todos y todas los lectores de este blog y de aquellos que conocían mis credos e ideologías que hoy renuncio a todo eso que fui. De mi parte, ya no más Lenin, ni Marx, ni Engels, ni patria o muerte. Esto ha quedado atrás pues nada de esto tiene más valía que lo que ahora alberga mi corazón. A partir de hoy cero comunismo, cero socialismo, cero cosas que llevan por entero a la destrucción. Pero que nadie se confunda, no abandono la ideología comunista por alguna otra ideología humana, pues si fuera así, de poco o de nada serviría este cambio.
Considero importante advertir que siempre estaré del lado de los que sufren, de los que padecen injusticias. Pero no seguiré más a los que incitan a la violencia como método para transformar al mundo. Por el contrario, pondré mi granito de arena para hacer saber a la gente que pronto vendrá otro sistema de cosas en el que ya no habrá injusticias, ni sufrimiento, ni lamento. Esta será ahora mi manera de estar con los desfavorecidos.
La Bodeguita no cambia en lo fundamental, aquí se seguirá charlando sobre diversos temas, como siempre, pues al final de cuentas estamos entre amigos.
Por último debo de decir que aunque yo ya no fumo, eso no impide que algún visitante a esta Bodeguita lo haga.
Adiós a Lenin…descanse en paz.
Sitio con algo de humor negro y jiribilla
